El anillo de boda es una representación visible de la unión consciente y voluntaria que establecemos con otra persona.
Sin embargo, en la vida existen también otros tipos de alianzas; unas que, a diferencia de esta hermosa unión matrimonial, hacemos de forma inconsciente y pueden traer consigo una gran destrucción.
No sé si estás de acuerdo conmigo, pero creo que el terror o el temor es de los peores enemigos que podemos enfrentar en la vida.
Cuando el temor se establece en nosotros, la angustia no es un visitante, sino que se vuelve un inquilino.
El temor boicotea nuestra paz y nos mantiene agobiados; afecta todo nuestro ser. (Mente, Cuerpo y Espíritu)
El temor es un enemigo grande y poderoso.
No obstante, el temor NO tiene autoridad sobre nosotros porque Dios nos ha dado autoridad para vencer cualquier temor.
Ahora bien, imagina que caminas hacia el altar para hacer un pacto. Sin embargo, quien te espera en el altar es un personaje que te infunde mucho temor. En lugar de amor, solo te provoca terror.
Te pregunto: ¿Harías alianza o saldrías corriendo? ¡Seguramente escaparías!
Imaginarlo de forma gráfica nos ayuda a entender cuál debe ser nuestra actitud resuelta, urgente y decidida frente al temor.
- No podemos caminar hacia él.
- No podemos darle lugar en nuestra vida.
- No podemos entregarnos a él.
Si hacemos alianza con el temor, aun cuando Dios lo haya vencido, tristemente nos destruirá.
Por eso Dios es tan enfático al decirnos:
¡NO HAGAS ALIANZA CON EL TEMOR!
No podemos permitir que el temor haga estragos en nuestra mente por las noches; que ante cualquier situación se apodere de nuestros pensamientos; y que nos dicte el futuro al enfrentar cualquier adversidad.
¡No lo podemos permitir! Dios ha sido claro:
DERRÓTALO, DESTRÚYELO y NO hagas PACTO con el TEMOR.
Hay personas que se pasan la mayoría de las horas del día temiendo. Transcurren los años y viven abrazados al temor.
No lo permitas más. Es hora de divorciarte del temor y hacer alianza con la fe; ese lugar seguro donde tu alma encuentra reposo.
Para hacer pacto con la fe y qué se acreciente en nuestra vida es totalmente necesario que nos expongamos diariamente a la Palabra de Dios.
A pesar de que, leer la Palabra de Dios es algo tan fácil de hacer, no lo ponemos en práctica con la frecuencia y el compromiso que debiéramos.
Dedicamos horas alimentando nuestros pensamientos de temor y ni siquiera unos minutos para nutrirnos con la Palabra de Dios; que nos llena de vida y seguridad.
Lee con regularidad la Palabra de Dios y memorízala. Ese es el alimento de la fe.
- La fe se alimenta con la Palabra.
- La ansiedad se alimenta con el temor.
- Provéele a tu mente el alimento correcto.
Recuerda: Jesús es tu verdadero novio.
Has alianza con Sus promesas.
Permite que sea Él, y no el temor, quien coloque el anillo en tu dedo y te proteja siempre.
Haz un pacto eterno con Dios: cada vez que el temor venga a tratar de amedrentarte, mira tu anillo, recuerda tu alianza, pon tus ojos en Aquel a quien te has estregado y en quien has creído, y permanece firmemente unido a Él.
El anhelo y trabajo de Dios es protegerte. El tuyo es no hacer pacto con el temor, sino confiar con fe en tu Redentor.
Hoy decide divorciarte del temor; y has alianza con la fe.
Con amor, de una GUAPA para otra GUAPA💋